Una breve introducción a los distintos tipos de tanques de almacenamiento

Hoy no centraremos en los tanques de almacenamiento diseñados y construidos según la especificación API-650 del Instituto Americano del Petróleo. Los tanques API 650:

  • son cilíndricos
  • son verticales
  • reposan totalmente sobre el suelo
  • son abiertos o techados
  • son soldados
  • admiten una presión interna máxima de 17,2kPa

Estos tanques pueden tener diferentes tamaños, que van desde 2 a más de 100 m de diámetro. Generalmente se instalan en el interior de cuencas de contención para contener los derrames en caso de ruptura del tanque.

Encontramos esos tanques de almacenamiento en refinería de petróleo, terminales de despacho y de importación de combustible o crudo, y en la industria petroquímica.

Podemos básicamente distinguir 6 tipos de tanques de almacenaje:

  • tanques abiertos (sin techo)
  • tanques de techo fijo clásico
    • sin membrana interna flotante
    • con membrana interna flotante
  • tanques de techo externo flotante
  • tanques de techo domo geodésico
    • sin membrana interna flotante
    • con membrana interna flotante

Tanque de techo fijo clásico, sin membrana interna flotante

Se trata de un diseño económico, sobre todo cuando hablamos de diámetros reducidos (inferiores a +/-20m). Tanto la envolvente como el techo suelen ser de acero al carbono. La envolvente hoy en día se fabrica a partir de chapas soldadas entre sí, aunque en el pasado se usaba remaches, solución que dejó de existir. Es conveniente usar chapas prefabricadas (cintradas, biseladas, pintadas) para ahorrar tiempo y dinero.

Cómo bien es sabido, esos tanques respiran: los vapores se contraen durante la noche, y al vaciarse entra aire adentro del tanque. De manera similar, durante el día los vapores se expanden y al llenarse el tanque, salen vapores a la atmosfera. Para mitigar ese fenómeno, es común instalar una válvula de presión vacío. Es una solución económica para diámetros chicos. Pero para diámetros mayores a 15/20 m, se recomienda optar por soluciones más eficientes.

Tanque de techo fijo clásico, con membrana interna flotante

Se trata de un diseño económico, sobre todo cuando hablamos de diámetros reducidos (inferior a +/-20m). Tanto la envolvente como el techo suelen ser de acero al carbono. La envolvente hoy en día se fabrica a partir de chapas soldadas entre sí, aunque en el pasado se usaba remaches, solución que dejó de existir. Es conveniente usar chapas prefabricadas (cintradas, biseladas, pintadas) para ahorrar tiempo y dinero.

Cómo bien es sabido, esos tanques respiran: los vapores se contraen durante la noche, y al vaciarse entra aire adentro del tanque. De manera similar, durante el día los vapores se expanden y al llenarse el tanque, salen vapores a la atmosfera. Para mitigar ese fenómeno, es común instalar una membrana interna flotante, mas aún cuando el producto almacenado es volátil.  

Tanque de techo externo flotante

Se trata de un diseño que aplica principalmente para diámetros importantes, y principalmente para el almacenamiento de crudo.

Esos tanques generan algunos inconvenientes, particularmente: problemas de drenaje del agua de lluvia, desgaste de los sellos perimetrales, comportamiento frente a un rayo. Por eso, se recomienda colocarle un techo domo geodésico.

Tanque de techo domo geodésico (con ó sin membrana interna flotante)

Son similares a las primeras categorías (aunque generalmente tienen un presión de operacion atmosférica), pero con las ventajas de los techos domos geodésicos.

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